Port-au-Prince has been shut down since June 17, and although E-Power, a private company, intends to replace the state-owned company, Electricité d’Haïti, it is not enough to solve the energy dilemma, which today reaches its nineteenth day.
In this context, the occupants of a hydroelectric plant maintain their position. waiting for the government to engage in a dialogue and respond to their demands.
Since June 17, residents of Mirebalais have been staging a protest at the Péligre plant.
Previously, from May 12 to 25 of this year, citizens has paralyzed the facility.
On that occasion, the government agreed to talks and promised the rebels that they would help put an end to the banditry in that area.
The residents accepted, but warned that if they failed to keep their promises, they would return to the camp, leaving the capital in darkness once again.
The authorities violated the agreement, and since June 17, Port-au-Prince has been living in darkness, as a large crowd invaded the Péligre hydroelectric plant, forcing employees to shut down the facility.
This time, to show they were serious, they damaged a pole supporting the cables that supply electricity to Port-au-Prince, and then two more towers were damaged.
The population accuses state authorities of being complicit with the gangs, and this argument fueled popular anger.
jrr/arm/rc/joe
Apagón en Puerto Príncipe marca semana noticiosa en Haití
Puerto Príncipe, 5 jul (Prensa Latina) Un apagón que afecta hoy a todos los sectores en esta capital marca la semana noticiosa en Haití, donde las autoridades siguen sin resolver el problema de una población que los acusa de complicidad con los bandidos.
Puerto Príncipe está apagado desde el 17 de junio, y aunque E-Power, una empresa particular, tiene la intención de suplir el rol de la empresa estatal Electricidad de Haití no es suficiente para solucionar el dilema energético que hoy llega a su décima novena jornada.
En ese contexto, los ocupantes de una hidroeléctrica mantienen hoy su postura de esperar a que el gobierno dialogue y responda a sus demandas.
Desde el 17 de junio pobladores de Mirebalais protagonizan una protesta en la central de Péligre. Con anterioridad,-del 12 al 25 de mayo del año en curso- los ciudadanos paralizaron la instalación.
En se ocasión, el gobierno aceptó conversar y le prometieron a los sublevados que ayudarían a poner fin al bandidaje en esa zona, los vecinos aceptaron, pero advirtieron que ante el incumpliendo de sus palabras, volverían a la instalación, y dejaría a oscuras nuevamente a la capital.
Las autoridades violaron el acuerdo, y desde el 17 de junio Puerto Príncipe viven en la penumbra, pues una gran multitud invadió la central hidroeléctrica de Péligre, obligando a los empleados a cerrar las instalaciones.
Esta vez para que vieran que iban en serio dañaron un poste que sostenía los cables que abastecen de electricidad a Puerto Príncipe, luego fueron afectadas dos torres más.
La población acusa a las autoridades estatales de ser cómplices de las pandillas, y este argumento avivó la ira popular.
rc/joe